Reflexión

Cuando triunfó el nuevo material de escritura [el pergamino], los libros se transformaron en cuerpos habitados por palabras, pensamientos tatuados en la piel. (El infinito en un junco. Irene Vallejo).

jueves, 31 de enero de 2013

Apuntes del mundo bohemio. “Mala hierba” (Pío Baroja)




Enfrentado a la lectura de Mala hierba me propongo como Manuel en La busca ser de los que trabajan al sol, no de los que buscan el placer de la sombra. Para ello hay que hablar de Baroja, de su obra. ¿Qué decir que no se haya recogido ya en comentarios anteriores? ¿Qué aportar? Como Manuel la tentación es permanecer en el estudio de Alejo Monzón escuchando pero… eso no basta, hay que ejecutar lo que se ha pensado, lo que se ha sentido.

La primera parte de Mala hierba, es continuación cronológica de La busca trasladando la acción al centro de Madrid. Manuel, el protagonista, aparece como testigo de la vida y milagros  de un grupo de bohemios, de sus características e idiosincrasia, como ya ocurriera en El lazarillo.

A mi juicio, hace Pío Baroja, algunas reflexiones significativas sobre la vida bohemia y los “artistas”.

Habían clasificado al mundo: Tal era admirable; Cual, detestable; H, un genio; B, un imbécil.
Y sus obras.
Al ir a detallar (en la escultura), los defectos iban apareciendo con más fuerza. Los dejaba sin terminar. Su orgullo le hacía creer  después que el modelar exactamente un brazo o una pierna, era una labor indigna y decadente.

Baroja nos hace contemplar a través de Manuel en estas primeras páginas un mundo menos mísero, pero no menos delincuente. El trabajo merecerá la pena.



7 comentarios:

Pedro Ojeda Escudero dijo...

La bohemia se había convertido en forma de vida y en necesidad de supervivencia para artistas, periodistas, escritores, poetas, etc. de aquellos años. En la bohemia hubo artistas de verdadero genio, pero las condiciones de su vida les impidió realizar una obra completa y sistemática: la mayor parte de ellos se limitaron a chispazos.
Baroja hace un retrato que anticipa mucho al esperpento de aquellos hombres: enre tierno y cruel.
Qué buena mirada la tuya, Paco.

pancho dijo...

Encantado de "ajuntarte" en el grupo de comentaristas de La Acequia, pero no te lo tomes tan en serio, eso de sol a sol es mucho y además el jornal es bajo, parecido al de Manuel.

La cuadrilla de tertulianos no entendía por qué Alex dejaba la escultura a medias. La vanguardia no había prendido en ellos.

A menudo resulta que cuanto más se asciende en la escala social, menos de fiar son las gentes.

Un abrazo

Mar dijo...

Me gusta la entrada que has publicado, Paco.
Un gran trabajo...

Besos y abrazos bohemios.

Recomenzar dijo...

es muy interesante como formas tus oraciones dando alegria a tus letras

Ele Bergón dijo...

Ahora otra vez me tengo que poner las pilas con "Mala Hierba", cuando la leí en mi juventud, recuerdo una obra muy oscura, en su contenido, pero a la vez ya me atraía ese mundo de bohemía que retrata.

Muy bien enlazado, como siempre, todo.

Un abrazo

Luz

Abejita de la Vega dijo...

En el estudio de Alex hace tanto frío como en la calle, pobre Manuel, las va a pasar canutas con los bohemios, tanto como con los randas.

Los blogueros somos gente de sol, me da la impresión.

Besos, bienvenido.

Gelu dijo...

Buenas noches, Paco Cuesta:

Roberto habla a Manuel, advirtiéndole sobre lo que supone vivir de modo bohemio:
"-Aun así, ellos tienen la ventaja de estar en la corriente, se conocen unos a otros, conocen a los periodistas, y, amigo, la prensa hoy es una fuerza bruta. Pero tú no, tú no puedes acercarte a la prensa; necesitarías siete u ocho años de preparación, de buscar amistades, recomendaciones. Y mientras tanto, ¿de qué comes?"
No solo eran palabras, sino que tenía todas sus horas ocupadas en el trabajo.

Saludos.