Memoria (escrita) es por definición la relación escrita en que el
autor narra su propia vida o acontecimientos de ella. Valle Inclán, en la
introducción a las Sonatas dice:
"Estas páginas son un fragmento de las “Memorias amables” que ya muy
viejo, empezó a escribir en la emigración el Marqués de Bradomín. Un Don Juan
admirable. ¡El más admirable tal vez!"
Las Sonatas son unas memorias voluntariamente parciales. En ellas sólo
se recoge una parte de los acontecimientos “unos fragmentos”, y por
añadidura los más amables.
Valle Inclán ha fraccionado las memorias para
dejarnos cuatro episodios amorosos, nostálgicos preñados de ternura y en
ocasiones patéticos “Todavía hoy, el recuerdo de la muerta, es para mí de una
tristeza depravada y sutil” con la intención de dejar constancia del lamento de
Bradomín por la vejez y la añoranza sensual.Imagen: Pazo de Ximonde. Vedra (Santiago)
8 comentarios:
Creo que las memorias siempre son "voluntariamente parciales"... ¡Buen broche final a la Sonata de Otoño! Besotes, M.
Magnífica forma de abordar el género al que pertenecen las Sonatas. Voluntariamente fragmentarias, como modernistas. Amables, en el sentido dieciochesco del término (es decir, que abordan las relaciones sentimentales). Cuánto me alegra que actualices, Paco. Un fuerte abrazo.
Memoria selectiva; todos lo hacemos.
biquiños,
Florisel se ha dado a la buena vida en este jardín. Bastante trabajo por hacer. Está bien lo que dices, pero yo creo que en este relato la intención de Valle era lucirse con su prosa. Sin olvidar la historia, claro, que siempre es esencial para que el vestido de las palabras cobre su verdadero sentido.
Un abrazo.
Las memorias suelen ser muy desmemoriadas.
Seguro que a Valle Inclán Bradomín se le quedaron en el tintero algunas aventurillas.
Besos, Paco
Y vaya que se lamenta por la vejez y etc jajajaja ¡¡tanto o más que en las "Ultratómbicas" el Vizconde François René de Chateaubriand!!
Besos
Me gusta los adjetivos que le pones a las Sonatas que tú llamas episodios: amorosos, nostálgicos, tiernos y patéticos.Creo que has acertado de pleno.
Un abrazo
Luz
La memoria es una amiga que nos conoce muy bien y, con la ayuda del paso del tiempo, altera los hechos para que solo oigamos nuestra verdad.
La memoria empieza siendo selectiva, como apunta Aldabra, luego, como dice Abejita, la memoria se vuelve desmemoriada y por último termina siendo nostálgica. El marqués de Bradomín ya ha alcanzado esta última fase.
Un abrazo.
José Manuel
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