Cervantes recuerda nuevamente al lector la mentalidad de una clase social ociosa y parasitaria cuyo solo objetivo es la diversión caiga quien caiga. No hay límite para el despilfarro ni escrúpulos para la humillación; utilizan a las personas como el titiritero a sus marionetas, haciéndoles transformarse, e interpretar el personaje más adecuado para conseguir el objetivo que se han marcado. Esta circunstancia se manifiesta especialmente en la reiteración de personajes travestidos, que, de alguna manera añaden si cabe, más burla a la burla.
Aparece en escena una condesa que cambia su denominación de Lobuna por la de Trifaldi en función de la forma de su falda de tres puntas que portan tres pajes seguidos de un séquito de doce dueñas enlutadas con las que la escena adquiere mayor dramatismo.
Al introducir la equivocación del criado-condesa y la abundancia de superlativos en el diálogo, pueden interpretarse dos intenciones:
- Los protagonistas superados por la representación no reparan en tan notorios errores.
- Perciben el absurdo, pero optan por no “romper el hechizo” hasta ver en qué termina todo.
Tanta ceremonia prepara psicológicamente a los protagonistas “quisiera que me hicieran sabidora si está en este gremio, corro y compañía el acendradísimo caballero don Quijote de la Manchísima y su escuderísimo Panza”, que no pueden por menos que aceptar el reto y mostrarse dispuestos a servir y remediar a la Dolorida dueña en lo que acontezca . Para no dar lugar al arrepentimiento, en una nueva escenografía la Trifaldi se postra a los pies de ambos. El Autor consigue en este punto que el lector se identifique con los protagonistas, se meta en su piel. ¡Que otra decisión pueden tomar!
De las intervenciones de Sancho, deduce el criado-dueña alguna suspicacia que soluciona con habilidad: “Conjúrote por lo que debes a tu bondad fidelísima, me seas buen intercesor con tu dueño, para que luego favorezca a esta humildísima y desdichada condesa”.Continúa el capítulo con una descripción novelesca en la que no faltan los ingredientes clásicos:
Bella infanta –Antonomasia.- Muchos pretendientes.
- Caballero poeta –Clavijo- que la seduce con ayuda de la dueña.
- Compromiso de matrimonio con vicario y alguacil.
Otro relato amoroso dentro de la novela al estilo de Cardenio y Luscinda o Quiteria y Camacho.
Sancho, harto seguramente de tanta descripción urge el fin de la historia; quiere saber que ha de hacerse, donde acudir. Le espera el cargo de gobernador de su ínsula.
8 comentarios:
Sin duda; habia que reirse, cayera quien cayera. Que barbaro, que duques mas miserables.
En cuanto al capitulo, ha mejorado algo la escenografia, pero los actores siguen siendo malisimos...!
Estupendo comentario.
Un abrazo.
Pudiera ser que crean que don Quijote y Sancho sean tan tontos,tan pusilánimes que serán capaces de creer cualquier cosa.Saludos
Estos nobles no reparan en gastos, utilizan la aparatosidad para confundir aun más a nuestros héroes. Sancho sospecha, pero no le interesa descubrir la trama, ve ya demasiado cerca la ínsula y le molesta tanto circunloquio de la Dueña Dolorisa. DQ vive feliz en una realidad que tiene que inventarse, el mundo real no le acepta en su locura.
¡Excelente análisis! Estoy a la espera de cómo termina todo este interminable juego malvado de los duques... Besotes, M.
Buen análisis. Sin duda, ni don Quijote ni Sancho podrían desmontar la trama aunque se dieran cuenta: los Duques están muy por encima de ellos en la jerarquía.
Me imagino que Cervantes así lo quiso...criticar al poderoso en la burla al más sencillo y vulgar... no es eso lo que ocurre hoy día??? No no están tomando el pelo los políticos...que son el poder...mientras ellos van a tener la "buchaca" llena...nosotros ¿nos jubilaremos? SALUDOS
Este superlastivo capítulo nos descubre a un Sancho que les paga con la misma moneda. A lo de "Manchísima" , el escudero responde con "quieridísimis", el verbo superlativo, el colmo...Si tu te guaseas, yo también.
Y el mayordomo qué buen vasallo, cómo se mete en el papel de Dolorida , para regocijo de sus señoritos.Cómo lo monta...
Todo tan bien montado que no hay posibilidad de pararlo, como tú certeramente apuntas: "no pueden por menos que aceptar el reto y mostrarse dispuestos a servir y remediar a la Dolorida dueña en lo que acontezca".
Un abrazo candayés
Bien dices que el capitulo es un retrato de la mentalidad de una clase social ociosa y parasita.
Cervantes es muy listo para decir las cosas sin "herir sensibilidades".
Ademas con la Inquisicion a todo fuego, no se podia descuidar.
Magistral papel el del Mayordomo haciendo de Condesa Trifaldi.
Vaya platica que se pego explicando la rocambolesca historia del fabricajaulas donjuan enamora dueñas e infantas. A una la rinde, pero a la segund la embaraza.
Un abrazo Paco
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